Marruecos

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Viajar a Marruecos 

Descubra lugares espectaculares viajando a Marruecos. Un país muy cerca y que ofrece un sinfín de posibilidades. Viaja en pareja, con familia o amigos. Sus medinas y socos son lugares para explorar y descubrir.

Marruecos es un país extenso y rico en diversidad geográfica. Entre sus carreteras que conectan las principales ciudades turísticas, el visitante puede encontrarse desde ciudades imperiales hasta montañas, playas y, obviamente, el desierto.

La moneda Marroquí

La moneda marroquí es el dirham (DH), dividido en 100 céntimos. Hay billetes de 10, 50, 100 y 200 DH y monedas de 1 y 5 DH y de 5, 10, 20, y 50 céntimos. Los dirhams sólo se pueden adquirir en Marruecos. Cambiar dinero en la calle es ilegal. En su propio interés, hágalo en los bancos o en los establecimientos autorizados (reconocibles por un distintivo dorado). No le cobrarán comisión y le entregarán un resguardo que le será indispensable para reconvertir sus dirhams sobrantes en la moneda de origen al final de su estancia. Puede retirar dinero en los Bancos con una tarjeta de crédito o con cheques, o bien directamente en el distribuidor de algunas grandes ciudades. Las tarjetas de crédito son generalmente aceptadas en los grandes hoteles, boutiques y restaurantes, y a veces incluso en los zocos.

Comer y beber 

La cocina marroquí reúne de un modo refinado las legumbres y los frutos impregnados de sol, especias extraordinarias y perfumadas, pescados delicados y carnes sabrosas… La mejor de las cocinas orientales, famosa en el mundo entero, y una fiesta para su paladar. He aquí los principales platos marroquíes, que debe Ud. probar sin falta.
Pinchos morunos
A la entrada de un zoco, en una plaza,al borde de una carretera se preparan ante sus ojos los deliciosos pinchos morunos.
Una delicia económica y rápida.
Cuscús
Es el tradicional almuerzo familiar del viernes, pero Ud. puede encontrarlo todos los días en los restaurantes. A lo largo del viaje, podrá degustar mil cuscús diferentes, ya que varían según las regiones y la creatividad de la cocinera.
Pruebe a no utilizar los cubiertos y luego cómalo con los dedos, al estilo marroquí.
Méchúí
Cordero asado en asador o al horno. ¡La carne se funde en la boca!.
Pastela
Una fina pasta de hojaldre, rellena de pichón y de almendras. Es el famoso “dulce-salado” marroquí. También hay variantes con pescado, pollo, e incluso con leche para el postre.
Plato del Ramadán
Al caer el sol, se rompe el ayuno (f´tour) con la rica y sabrosa harira -una sopa con carne, lentejas y garbanzos-, los beghrir -pequeños pastelillos (crépes) de nido de abeja servidos con mantequilla fundida y miel- y los shebbakia -pasteles fritos en aceite y recubiertos de miel.
Tajine
Esta palabra designa al mismo tiempo el continente -plato de tierra cocida decorado, con la típica tapadera cónica- y el contenido -ragut de carne, de pollo, pescado y legumbres estofadas-. Pruébelo y comprenderá por qué el tajine es el plato nacional marroquí.
Té a la menta
Sirve para tranquilizar, reanimar, entonar; se bebe por la mañana, después de las comidas, a cualquier hora. Es un placer que no se rechaza jamás.
Pastelería
pasteles de miel, granos de gacela, feqqas con almendras, uvas pasas, ghoriba con almendras, con sésamo… ¡Irresisitible!.

Lugares por visitar

Hay muchas ciudades y pequeñas villas que atraen miles de turistas todos los años. todo depende del tiempo que tendras diponibles para elegir que lugares visitar.

Marrakech (o ‘tierra de Dios’)
También conocida como ‘La ville Rouge’ (la ciudad roja), la ciudad recibe este apodo debido al árido rojo monocromático de sus casas y edificios, ricos en historia y arquitectura. Esta aridez está marcada por la división de la ciudad en dos partes: la Medina o centro histórico (centre-ville) y la Nouvelle-Ville (villa nueva). Entre los 23 muros que rodean la medina podrás dejarte llevar por las calles repletas de restaurantes, puestos de zumos naturales y vendedores ambulantes. Pasa un rato en los Zocos, que son los famosos puestos artesanales situados en el corazón de la Medina.

Consejo: Antes de comprar, regatea absolutamente TODO. Los marroquíes tienen la cultura de fijar precios muy altos y bajarlos con cada ganga.

Otro buen consejo es darse un baño marroquí. Es un ritual donde primero te dan un baño exfoliante en una sauna y luego un masaje relajante. Aún en la Medina, aproveche para visitar el Palacio de la Bahía, la Koutoubia, el jardín Majorelle y el Museo de Marrakech. Cada uno de estos lugares cuenta mucha de la historia marroquí preservada a través de sus murallas y edificios. Por la noche lo mejor es pasear por la plaza Jemaa El-Fna. Allí encontrará una gran variedad de cocina marroquí entre los puestos de comida y bebida.

Nouvelle-Ville, o Guéliz, es la parte más occidental de la ciudad. Es donde encontrarás boutiques de lujo y las famosas tiendas europeas de moda rápida. Vale la pena hacer un viaje para ver la parte moderna de la ciudad, pero el verdadero encanto reside en la parte histórica. ¡Visitar Marrakech es sin duda una experiencia increíble!

Chaouen 

Situada en el norte de Marruecos, cerca de Tetuán. Los principales atractivos de la ciudad se encuentran en la Medina, por lo que un día es suficiente para visitar todos los lugares a pie. La belleza de este pueblo reside en las casas y calles pintadas de azul. lo cual le da un toque único! Es imprescindible conocer este lugar.

Fez

Sus calles laberínticas, los innumerables puestos de sus zocos, invariablemente repletos de las mercaderías más insólitas, las solemnes mezquitas y madrasas, los recovecos que regalan postales únicas … Adentrase en esos pequeños universos que forman las viejas medinas supone un viaje fascinante.

Y precisamente en el corazón de Marruecos, en una de sus cuatro ciudades imperiales, la histórica Fez, se encuentra una de las medinas más impresionantes del norte de África, la más antigua del país y la más grande del mundo. Un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que guarda la esencia más auténtica de este singular destino.

Desierto

Conocer el desierto del Sahara es un auténtico sueño para los verdaderos viajeros. Merzouga! Es un pequeño pueblo en el sureste de Marruecos, donde se encuentra la perla del desierto del Sahara. ¡Es una joya preciosa y muy popular entre turistas de todo el mundo! Las inmensas dunas de Erg Chebbi, algunas de las más altas de todo Marruecos, se elevan majestuosamente en el paisaje, creando una vista impresionante que te dejará sin aliento.

Viaja a Marruecos con Flandria !